La ciudadana, identificada como Betty Pérez, comienza su relato asegurando que cuando comenzó a sentir los síntomas, no pensó que se tratara de coronavirus. Sin embargo, cuenta que comenzó a tomar medicamentos desde su casa y en vez de mejorar, fue “empeorando”.
“Me faltaba la respiración, me llevaron al CDI primero, ahí me hicieron la prueba, en la prueba rápida salí positiva. Yo sentía un dolor muy fuerte en el pecho. Yo dije: yo no voy a un hospital, yo me curo aquí -en su casa- porque yo veía en las redes ‘no, mira cómo sacan a los muertos’, yo eso lo vi, hasta que no aguanté más, yo no caminaba cuando me llevaron, me llevaron al Hospital Universitario, enseguida me pusieron oxígeno y medicamentos, hasta que me estabilizaron”, narró.
A lo largo del discurso, Pérez continúa resaltando otros aspectos como la alimentación y el trato por parte del personal médico.
“Mi cama, la que me tocó a mí, era una cama nueva, nos daban el desayuno y el almuerzo con la cena, y comida buena y bastante, porque era bastante (…) los doctores, te tocan como si fueran familia de ellos. Yo le recomiendo ir al hospital en los primeros síntomas, si uno se tarda, hay un momento en el que el doctor ya no puede hacer nada. Porque si yo no hubiera ido al hospital, me muero. A mí me salvaron en el hospital”, concluyó.
A pesar de sus declaraciones, desde que se registraran los primeros casos de coronavirus en el país, han sido constantes las denuncias por parte de los pacientes venezolanos que aseguran no contar con buena atención médica, acceso a la alimentación ni a servicios públicos como el agua.
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